La importancia que tuvo el Camino de Santiago hizo que la imagen del santo se multiplicara.
Curiosamente, y al contrario de otros santos, su iconografía fue bastante variada, derivada de las múltiples vidas de las que ya hablamos aquí
La más tradicional es la de representarlo como peregrino con el típico bordón, bolso y concha de vieira, como en esta fantástica imagen de Santa María de Tera
La imagen, incluso, se trasladó a nuevos significados, como los peregrinos de Emaus, de Silos.
Su descubrimiento en el Campus Stelae que Beato se encargó de magnificar con claras intenciones políticas, hace surgir otra representación, la apertura del Sepulcro, como en esta pintura de Ribalta. La invención de Santiago con la inevitable presencia del rey.
Ya durante el barroco la figura de Santiago tuvo dos imágenes significativas.
Por una parte, su martirio, perfecto para el mundo de los sentimientos de la Contrarreforma. convirtiendo el mártir en el nuevo héroe cristiano, en palabras de Checa
Autores como Navarrete el Mudo o Ribalta harán las mejores representaciones de este modelo
Y aún más popular fue la de Santiago Matamoros. Una imagen políticamente incorrecta que, sin embargo, representaba tan precisamente la ideología de los siglos XVI y XVII, nuestra España Imperial, católica y de cruzada.
Su origen deriva de la leyenda de la aparición de Santiago a lomos de su caballo blanco en la batalla de Clavijo, en la que Ramiro I intenta romper el tributo de las cien doncellas.
Brea de Tajo. Madrid
Y es que el aumento de su culto en tiempos barrocos fue considerable tras la larga polémica que se abrió para ver quien sería el patrón de España: Santiago o Santa Teresa, y que enfrentó a distintas órdenes monásticas, nobles e intelectuales.
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Para saber más de la vida de Santiago
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ÍNDICE DE ICONOGRAFÍAS DE SANTOS
Palios 
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