En la parroquia de San Francisco de Córdoba se encuentra esta magnífica talla, realizada en torno al año 1680 y 1684.
Siempre se ha visto las grandísimas semejanzas con el Ecce Homo de la autora de la Catedral de Cádiz (que en origen también fue un busto pues las piernas se las añadieron en el XVIII
Por ello se piensa que fueran coetáneos aunque sin saber cual primero.
El de Córdoba mantiene su policromía en un estado excepcional tanto en paños como en carnaciones. La realiza su cuñado, Tomás de los Arcos Navarro.
Su boca abierta, expresividad y corona tallada en la propia pieza siempre se ha relacionado con el Gran Poder de Mesa
Sin embargo, la producción más antigua de Mora, sin ser tan característica, aún mantiene un mayor contacto con la gran plástica andaluza, con una tragedia más contenida y un gusto por la belleza clasicista.
Este es el caso de esta piedad, muy entroncada con producciones anteriores (como la que ya analizamos de Juan de Mesa en Córdoba) en donde la tensión viene generada por ese cuerpo que apenas cabe en el seno de la madre, ya rígido. Casi una formulación tardogótica que contrasta con la belleza serena que tiene la Virgen tras sus lágrimas (curiosamente, su posición de manos nos recuerda más a la de una dolorosa exenta que a la de una piedad, ¿acaso la figura del Cristo es de otra mano? Realmente, su anatomía es demasiado musculosa y contundente para lo que suele ser habitual en Mora, y de calidad inferior a su obra habitual)
Felipe de Bigarny, Biguerny o Vigarny, también llamado Felipe de Borgoña o el Borgoñón (Langres, Francia, h. 1475 – Toledo, 1543)
En sus comienzos su obra juega entre las formas borgoñonas, las flamencas y las renacentistas italianas, decantándose hacia estas últimas en su obra más madura.
Salzillo (del que tenemos ya aquí una amplia fotogalería enlazada), fue el verdadero creador de la escuela murciana que trajo los ecos barrocos y protorrococós a este campo de la imaginería.
La caída. Murcia
Su fama le permitió trabajar para varias hermandades para las que realizó un estilo de paso complejo, normalmente ocupado por múltiples figuras, con gran cantidad de postizos (desde los ropajes, olivos naturales, comida verdadera)
Con suaves anatomías, una belleza ya casi rayana en el rococó y huyendo del dramatismo, sus esculturas se policroman en brillo, con complejas composiciones pensadas para ser vistas desde varios ángulos de visión
Este año ha sido presentada presentada públicamente la última adquisición del Museo de Bellas Artes de Sevilla.
Se trata de una terracota de pequeño tamaño con el tema de la Virgen de la Leche, un tema tierno, profundamente humano y maternal, típico de las devociones privadas .
No conocemos sobre el comitente de esta obra, aunque muy posiblemente fuera una compra privada, siendo realizada durante el periodo madrileño de la imaginera (1689-1706)
La terracota se encuentra policromada por su cuñado, Tomás de los Arcos.
Se trata de una composición muy equilibrada, tanto con la simetría como por los dos triángulos (invertido uno sobre otro) siendo el vértice de ambos la cabeza de la Virgen. Sólo la amplia diagonal del manto genera algo de movimiento (y junto a él las otras pequeñas diagonales creadas por los ángeles, el Niño, el manto).
Toda la obra tiene un minucioso modelado que tiende a las formas blandas, con un profundo trabajo en los pequeños y variados pliegues de los paños.
Todo lo dicho confiere a la obra una dulzura muy habitual en esta etapa madura de la escultora, en especial en sus encargos particulares, como se puede ver aquí
TEMA:se trata de una escultura religiosa, es una iconografía sobre el sacrificio que tuvo que hacer Abraham por Dios; sacrificar a su único hijo(el prometido que poblaría la tierra de Canaán, Isaac) este sacrificio era una prueba de su fe, Abraham sin dudarlo se dirige al monte para cumplir la orden, ató a su hijo y trató de degollarlo, sin embargo Dios le detuvo, confirmando su fe.
TIPOLOGÍA: escultura exenta de bulto redondo con técnica del estofado y encarnado. Grupo escultórico (Abraham y su hijo Isaac). Originalmente estaba situado junto a otras figuras (S. Sebastián y S. Cristóbal) en el retablo de San Benito el Real de Valladolid por encargo.
MATERIAL: madera policromada y dorada cuyo procedimiento es la talla con estofado en óleo.
COMPOSICIÓN: la obra es abierta, su punto de vista es múltiple, el espectador puede verlo desde diversos ángulos. Se observa la forma serpentinata manierista (de Miguel Ángel) que consigue dar expresión dinámica al padre y movimiento. En cuanto a la anatomía, se desarrolla el desnudo y se trabajan los músculos debido a que es el momento de mayor tensión, hay desproporción como la cabeza de Isaac en comparación con el cuerpo, por medio de las deformaciones,la obra consigue drama y tensión. Debido a que el autor trabaja deprisa, hay defectos en la obra.
MODELADO: debido al dorado se consigue dar brillo a las figuras,además también se consiguen claroscuros con las posiciones, la barba, los ojos expresivos y las bocas abiertas.
COLOR: policromado, destaca el dorado en el estofado
FIGURAS: realistas, canon alargado (10 veces la cabeza) las posiciones son dinámicas puesto que el es el momento de mayor tensión. Las figuras son expresivas, denotan rabia, terror y sufrimiento, con miradas duras. Hay relación entre ambas figuras, Abraham sujeta a su hijo Isaac maniatado intentando degollarlo
COMENTARIO: la obra pertenece al renacimiento español (XV-XVI) realizada entre 1526 y 1532. Con un fuerte sentimiento religioso, dándole mucha importancia a la expresividad, con un estilo muy dinámico y dramático. Es muy común la preferencia del alabastro y la técnica del estofado con rostros expresivos y tendencia al realismo.
Esta obra se enmarca en una España gobernada por los Reyes Católicos cuyo Imperio lo hereda Carlos I y mantiene Felipe II, se expulsan a los judíos, se crea la Inquisición y se inicia la Reforma protestante en tiempos de Carlos I. Fue clave la defensa de la ortodoxia católica, se dirige la expresión artística hacia una temática conservadora (se suprime la libertad creadora).
A diferencia de Italia, en España hay ausencia de la burguesía, puesto que no se le da importancia a las ciudades, por lo que las obrasde arte las demandaban y financiaban la nobleza y la Iglesia, optando por una función y temática propagandística y religiosa. Berruguete tuvo contacto con Donatello, Miguel Ángel y Leonardo, por lo que pudo conocer el Manierismo, viendo el Laocoonte e inspirándose en los volúmenes y la terribilitá de Miguel Ángel. El renacimiento en España supuso una evolución lenta desde el gótico al renacimiento, manteniendo/heredando características propias del gótico, como las formas alargadas y estilizadas
El último de los post que le dedicamos a esta iglesia de Vergara nos lleva a una obra verdaderamente exquisita en donde aparece Santa Teresa como doctora de la iglesia, sin otro tipo de intervención divina como podemos ver en imágenes posteriores (como la de San José).
En este caso su rococó ha parado para buscar una sobriedad y belleza clásica verdaderamente excepcional
En su zona central central encontramos un movido San Miguel derrotando al Mal, casi un puro juego de equilibrismo y elegancia rococó de espectacular colorido.
Sobre él encontramos un tema novedoso en la iconografía, el ángel de la Guarda.
Esta nueva adquisición del Museo Nacional de Escultura nos muestra uno de los momentos más interesantes del barroco granadino, cuando Pedro de Mena comienza a colaborar activamente con Alonso Cano (llegado a la ciudad), tomando de él numerosos tipos y maneras de trabajo.
El primer momento de la colaboración fue en la desaparecida iglesia del Ángel Custodio en donde ya se realiza este modelo que Cano formula desde una resignificación de un modelo clásico, el Sileno con Baco de Lisipo del que existía en Palacio una copia en yeso, así como numerosos grabados.
En 1624 Gregorio Fernández se compromete a hacer un inmenso retablo para la catedral de Plasencia.
Para la obra arquitectónica se eligieron dos artídfices de su círculo de confianza Cristóbal y Juan Velázquez, que crearán una máquina manierista, de calle central remarcada y dos laterales rehundidas que funcionan como alas; todo realizado a través de columnas, hornacinas y dobles entablamentos (el superior será ocupado en cada piso para relieves narrativos)
Las continuas dilaciones del maestro (cada vez más impedido) hará el que taller realice una gran parte de la obra y se sustituyan ciertas zonas laterales por cuadros (los inferiores por Ricci).
Pese a todo nos encontramos una magnífica colección de escultura, destacando especialmente la Asunción (que sigue el modelo de Miranda de Duero y juega con múltiples planos para la creación conjunta de la escena que termina saliendo de su propio marco por medio de ángeles que hacen incluir en la escena a San Joaquín y Santa Ana, padres de la Virgen) y el Calvario superior al que, junto a la tradicional Deesis, se añade a sus pies la figura implorante de Magdalena