TRES OBRAS DEL QUATTROCENTO EN SANTA ANNA DEI LOMBARDI. NÁPOLES

En la iglesia de Santa Anna dei Lombarda de Nápoles podemos encontrar estas magníficas muestras de arte del Quattrocento

Las dos primeras se encuentran en la capilla Piccolomini y son encargos venidos directamente del mundo florentino.

La primera es obra de Antonio Rosselino (tercer tercio del XV)

En su lateral encontramos otra (de mayor bulto y expresividad) fruto de la colaboración de Rosselino y Maiano.

Mientras que en la pared contraria encontramos con pinturas del círculo de Piero Della Francesca

Todas ellas nos hablan de este segundo Quattrocento florentino lleno de grazia y exquisitez, con una labra fina del mármol aprendida en las obras de Donatello. De ellos se ha eliminado cualquier tipo de forma desagradable pese a tratarse de sepulcros y reina esta finura que podemos ver, en pintura, en la obra de Botticelli

Frente a ellos nos encontramos con la producción de un taller boloñés: Guido Mazzoni. Tanto su material (la terracota) como su fuerte expresividad o su canon y movimiento nos hablan más del mundo medieval y español frente al italianismo de los primeros (aquí hablamos más de este tipo de obras en relación con otra lamentación realizada por Niccoló dell´Arca)

En su origen estuvo policromado, creando unas sensaciones mucho más diferentes, como pueden verse aquí

PARA CONOCER MÁS COSAS DE NÁPOLES

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Vicente Camarasa